Laura y su madre, Maribel, van a pasar un fin de semana en un hotel de lujo que les ha tocado gracias a un sorteo. Cuando llegan allí, Laura tiene un encuentro inesperado: la jefa de seguridad del hotel es una vieja conocida, de cuando ambas estudiaban en la academia. La vida les ha llevado por caminos diferentes: Laura está sobrepasada por su trabajo y su familia mientras su ex compañera vive como quiere. “Tengo que atender un asunto… Será solo un momento, espérame aquí, bajo y hablamos con calma”, le dice. Laura la espera y se lleva el susto de su vida cuando su antigua compañera cae precipitada al vacío. Laura comenzará a investigar el asesinato: la detective tenía asuntos pendientes con cuatro personas. Pero hay un problema… los cuatro principales sospechosos estaban abajo, en el restaurante, cuando el asesino precipitó a la víctima desde una de las habitaciones. ¿Cómo se las ingenió el asesino para estar en dos sitios a la vez?